Ciruelos de Cervera es una pequeña localidad situada en la comarca de Arlanza provincia de Burgos, en la comunidad autónoma de Castilla y León, España. Dista 67 km de la capital, al sur de la Peña Cervera, junto al Espacio Natural de los Sabinares del Arlanza y Arroyos de Valdelajas.
Ciruelos es la capital del municipio, que cuenta además con la entidad local menor de Briongos, y la finca Valdegabon como núcleo diseminado. Forma parte de la Mancomunidad de La Yecla, con sede en Santa María del Mercadillo.
Ciruelos de Cervera es un lugar con una rica historia rural, que ha sabido adaptarse a los cambios a lo largo del tiempo, manteniendo su cultura y tradiciones. El pueblo ha mantenido su esencia tradicional, con una arquitectura típica de la zona y un estilo de vida ligado a la agricultura y la ganadería. A lo largo de los años, ha experimentado cambios demográficos y económicos, como muchas otras localidades rurales en España, enfrentando retos como la despoblación. Actualmente, su población es de 99 habitantes (INE 2024) en un área de 37,87 km² y una densidad de 2,61 hab/km².
El 34% del término municipal de Ciruelos de Cervera (1291,87 hectáreas) queda afectado por la ZEPA Sabinares del Arlanza, donde destacan las siguientes especies: el buitre leonado (Gyps fulvus) y el alimoche (Neophron percnopterus).
Ciruelos de Cervera también cuenta con un patrimonio cultural que refleja su historia, incluyendo iglesias y construcciones que datan de épocas pasadas. El principal edificio de este núcleo es la iglesia parroquial dedicada a San Sebastián Mártir. La iglesia presenta una cabecera y pórtico gótico característico del siglo XIII. En el siglo XVIII, sufrió una fuerte remodelación con la ampliación de dos naves laterales, el traslado de la fachada del lado Sur a los pies de la iglesia y el cierre de la puerta con un frontón. La modificación neoclásica está datada en 1783 como recoge la clave del arco superior de la fachada principal. La fachada se cierra con una escultura del patrón de la iglesia, San Sebastián Mártir. La comunidad local se caracteriza por su cercanía y la preservación de tradiciones, lo que contribuye a su identidad.
